GRANDILOCUENCIA
La vida no se juega en tener o ser el más en comparación con otros: el que tiene el mejor auto, el más inteligente del colegio, el más generoso, el más talentoso, el más lo que sea, etc.
La vida no se juega en la grandilocuencia.
La vida se juega en el ser y hacer de la mejor forma posible todo aquello que somos y hacemos. La vida se juega en dedicarnos con devoción a nuestros afanes, en ser mejores que lo que fuimos ayer con respecto a nosotros mismos, en entregar al mundo aquello que sabemos hacer bien, nuestros talentos y nos gusta hacer, en estar disponibles para tender una mano a quien lo necesite…
La vida no se juega en el “más” que el del lado, ni en agradar al del lado, ni en que el del lado nos admire; ni en aparentar “ser” para que esto ocurra…se juega en referencia a la propia existencia, en la realidad del esfuerzo para el logro verdadero, se juega en seguir los valores que iluminan la vida de cada uno, en elegir bien para no perder lo valioso.
¿Para qué ser mejor que el otro?, ¿Qué hay más profundo a «ser mejor que el del lado»?
Si estás en un momento en que quieres saber en que se juega tú vida y comenzar ese “juego” yo puedo darte una mano