DOLORES PEGADOS
El dolor es parte de la vida, el sufrimiento es el dolor pegado y es parte de tu decisión, pero claro, suena fácil aquello de “decidir” acerca del dolor, aunque, no lo es tanto.
En mi experiencia profesional y en mi vida, he conocido de esas tristezas que duelen, pero son calmas; sin embargo, he conocido de esas penas que duelen y son tormentosas. Estas últimas, claramente, son más difíciles de superar.
Y es que el pensamiento, el recuerdo y el pasado juegan una mala pasada poniendo en la mira lo ocurrido. El esfuerzo que hay que hacer para sacar esos pensamientos cuando llegan, es importante, sin embargo, es posible y como tantas cosas en la vida, en la medida que se practica, se va haciendo más fácil.
¿Cómo sacar los pensamientos que me devuelven al dolor?
Primero, escuchándolos, luego poniendo otros que miren hacia adelante, que te lleven a donde quieres llegar, que te iluminen en la ilusión del nuevo equilibrio. Y estos pensamientos nuevos hay que mantenerlos en la conciencia hasta que generen la emoción acorde con ellos.
Poniendo en la conciencia ideas a concretar, proyectos que motivan, recuerdos de bellos momentos, imágenes que alientan.
Poniendo frases que podrían parecer no servir, pero que te llevan a creer, a confiar, a conectar con tu fuerza interna, aunque sea por repetición.
Maneras hay muchas y tu ser interno con certeza te irá mostrando algunas otras.
Si estás en un momento en que quieres trabajar en tus dolores para que no sean sufrimientos, yo puedo darte una mano.
