CUANDO EL PANORAMA SE PONE NEGRO
Cuando el panorama se pone negro, hay que poner color a la vida.
Y ¿qué es poner color a la vida?
Lo primero es que circunscribas la “negrura” es decir, no generalices…”todo” no se pone negro, es un aspecto de tu vida el que se oscurece a causa de alguna dificultad, pero en la medida que no logres “aislar” la zona vital en problemas, efectivamente, esa negrura se irá expandiendo y contagiando otras áreas.
En medio de la dificultad – y mientras más importante sea ésta – es más difícil lograr focalizar, sin embargo, es de suma importancia hacerlo.
Al focalizar, es decir al poner foco en el aspecto en particular, lo que haces es despejar el resto de tu vida de esa sensación de problema y con esto, lo que a su vez haces, es dejar el resto sin ser contagiado de dificultad y por lo tanto son aspectos a los que puedes acudir para tomar un aire.
Por ejemplo, si la dificultad está en el trabajo, pero tus relaciones familiares van bien, puedes buscar refugio, contención y compañía en la familia y al sentirte bien en este ámbito, lograrás tener más energía o energía renovada para continuar avanzando en el trabajo.
Circunscribir la dificultad, te permite reconocer espacios donde pedir ayuda, pues si “todo” esta mal, difícilmente podrás saber dónde acudir para pedir ese respaldo.
Focalizar la dificultad te permite mantener un ánimo adecuado en todo el resto de aspectos que están conservados y con ello, puedes dimensionar adecuadamente ese ámbito que está en dificultad.
El ánimo por sí sólo no trae soluciones, pero es la gasolina necesaria para que puedas ir en busca de ellas, particularmente con el agregado fundamental que es creer que las encontrarás.
Si estás en un momento en que ves que tu panorama se está poniendo negro, yo puedo darte una mano.
