PUNTUALIDAD

Llegar tarde, costumbre chilena, puede ser “simpático” en ocasiones y “desagradable” en otras, pero llegar tarde en la vida sí que es una mala experiencia.

Pero ¿qué es llegar tarde en la vida? Daré un ejemplo:

Dos personas sin trabajo hace muchísimo tiempo, ya viviendo en el desespero y con tantos otros problemas sumados objetivamente y otros tantos sumados por estar mirando la vida desde ese desespero…uno de ellos solicitó ayuda y no llegó en el momento de recibirla ¿Por flojo?, ¿por desagradecido?, ¿por irresponsable? ¡No!, porque a estas alturas ya no es capaz de dar pasos distintos al estar atrapado y seguir atrapándose en la desesperación de una realidad bastante concreta.

Ambas personas si no logran romper la inercia de la cesantía y la “desgracia”, tienen un mal pronóstico.

Tenían que haber llegado antes a consulta…pero claro, dinero para el psicólogo ni soñando. ¿Por qué llegaron? porque otros pidieron auxilio por ellos, sin embargo, esta ayuda pareciera ser tarde o al menos no a tiempo, ya que cuando se entra en un loop de desesperanza, de frustración; entonces la vida se tiñe de esas tonalidades y frente a una posible salida del gran problema, no hay energía para tomarla, se piensa mal y se jerarquiza mal. Porque se piensa en soluciones que no son viables, que generan un gran riesgo, que no van en el orden de resolución que han de ir.

Eso es un ejemplo de haber llegado tarde y para evitar la impuntualidad con la existencia, hay dos caminos: el primero, como ya he dicho otras veces, es ser superior a las circunstancias y mantener la autoconciencia para no llegar al punto de la desesperación.  El segundo es buscar ayuda antes y – sobre todo – buscar ayuda no lineal, es decir, en el ejemplo, la ayuda no era sólo difundir el currículum.

Y hay un tercer camino, pero que ya depende del entorno: si ves a alguien sumiéndose en la dificultad, ayúdalo a mantener la autoconciencia o pide ayuda por él antes de que comience a ser tarde.

Si estás en un momento en que quieres ser puntual con tu existencia, yo puedo darte una mano.

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